Una de las cosas que digo en mi presentación, es que mi intención es hablaros también acerca de otros temas más mundanos, casi siempre relacionados con la moto.

Bien pues hoy, mientras escucho el podcast de Viajo en Moto en el avión de camino a España, os quiero hablar del día a día, de ir a trabajar. Hace ya algunos años, unos 9, que estando trabajando en Madrid y comiéndome unos atascos importantes, decidí recurrir a la moto como solución a mis problemas de pérdida de tiempo en la carretera. Primero como convalidado con una 125 y unos seis meses después, con mi A2 y mi primera moto grande, una gs500. Fue en ese momento cuando empecé, no sólo a disfrutar de la moto, sino a usarla a diario para ir a trabajar.

gs500

Al principio las condiciones climáticas me condicionaban un poco, dejando la moto en casa siempre que hacía frío o llovía. Pero cambié de trabajo y la ruta era aún peor, con el condicionante de que era imposible aparcar el coche en el destino. Así que durante tres años día sí y día también me hacia mis 90 kms. diarios ida y vuelta al trabajo.

Pero, y qué pasó con el rollo ese de no salir cuando llueve o cuando hace mucho frío. Al principio e de decir que sufría un poco, sobre todo con el frío, porque circular en moto con 4 o 5 grados bajo cero en pleno invierno en Madrid no es lo ideal. Pero la experiencia y los gadgets te acaban ayudando a pasar menos frío.

Alguien me dijo una vez: «si la cabeza, las manos y los pies se mantienen bien, el resto del cuerpo no tendrá frío «. Dispuesto a probar esto, me compré unos guantes calefactados. Años después, sigo convencido que no hay un mejor sistema para que, al menos, nose te congelen las manos. He probado guantes de goretex, soto guantes, puños calefactados, … Nada de esto se acerca a los guantes calefactados. Para los que no sepáis lo que son, son unos guantes que llevan un soto guante con malla de eléctrica que se conecta a la batería de la moto, o a una externa. Llevan un regulador, en mi caso son de la marca Klan y llevan tres posiciones: apagado, min. y max. Con la posición max, casi se te queman las manos. En este link podéis ver a qué me refiero.

Para la cabeza, es más fácil, un soto casco o una braga si, como yo, llevas gafas y no quieres que se empañen. Si hace mucho frío y te cabe, una braga corta vientos y una braga de lana encima, hacen que la cabeza se mantenga calentita sin problema.

Para los pies, al principio, probé varios tipos de calcetines aislantes, corta vientos, pero no eran suficiente. Así que siguiendo con la marca de mis guantes, encontré que también había unos calcetines calefactados, yujuuuu! Llegan hasta la rodilla y van conectados al mismo regulador que los guantes y funcionan de maravilla.

El equipo completo para pasar menos frío testado en condiciones bastante frías y la experiencia de ponerlo a diario,  porque claro, se tarda un rato en salir cuando tienes que ponerte todo eso, es perfecto para disfrutar de tus viajes, o simplemente de ir a trabajar incluso en las condiciones más duras.

Y vosotros, como os protegéis del frío en la moto?

Otro día hablamos de la lluvia y, por qué no, también del calor, que algo se puede hacer para pasar un poquito menos.

Categories:

Tags:

No responses yet

Deja un comentario